Los juegos para estimular a los niños son una actividad recreativa física o mental que permite que los niños aprendan destrezas y habilidades, así como, a respetar unas normas. Existen muchos tipos de juego dependiendo de cómo y qué habilidades quieres estimular en tus hijos.
En este artículo de Smart Nursery os traemos 6 ideas de juegos para estimular a los niños .¡Sigue leyendo para enterarte de todas!
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Pompas de jabón
Las pompas de jabón son la debilidad de los pequeños. Les encanta correr detrás de ellas, verlas flotar y estallarlas. Para este juego necesitarás un frasco con agua y jabón y una varilla con varios agujeros o varillas con agujeros de diferentes tamaños.
Lo mejor es que juegues con tu hijo a que corra y persiga las pompas para estallarlas. Esto favorecerá la coordinación entre su vista y sus manos, además de mejorar su motricidad. Tu pequeño aprenderá a entender el espacio y situarse en él al perseguir las pompas.
Si le enseñas a hacer las pompas contigo, aprenderá a soplar. Y al estallarlas, empezará a comprender ciertos aspectos de la causa y efecto.
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Crear su propia cabaña
Todo niño necesita un lugar propio, un refugio dónde sentirse seguro, jugar, imaginar y pasar tiempo consigo mismo.
Por supuesto que existen miles de cabañas o tiendas de campaña ya listas para comprar, pero si quieres hacerla tú es muy fácil. Solo necesitarás una sábana o tela grande y dos sillas, para colocarla por encima, o si quieres hacerla más profesional, engancha la tela con cuerdas a otros muebles o a las paredes de la habitación.
Añade dentro de la cabaña mantas, cojines, juguetes, peluches e incluso una lamparita. Esto hará que tu pequeño se familiarice con el entorno y sienta que esa cabaña es su lugar, un refugio. Favorecerá su sentido del entorno y la ubicación al poder salir y entrar. Además, desarrollará su imaginación al inventar miles de escenarios e historias dentro de esa cabaña, podrá ser lo que él o ella quiera, un barco pirata, un castillo…
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Juegos para estimular a los niños con utensilios
En el momento de cocinar, en el baño o como actividad aislada, dale a tu hijo tazas, coladores y otros recipientes irrompibles de diferentes tamaños y un recipiente con agua (será más divertido para él si el agua es de color) para que lo manipule a su antojo. Enséñale a verter el agua de un recipiente al otro, llenarlos, vaciarlos…
Tu pequeño podrá comprender mejor cómo funciona el agua y los líquidos, el continente y el contenido. Aprenderá a servir y servirse agua, y se sentirá menos abrumado cuando vaya al mar o la piscina al conocer el elemento.
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Texturas
Coge diferentes recipientes, transparentes y lo suficientemente anchos para que entre tu mano y la de tu hijo. Añade en cada uno diferentes ingredientes que tengas en la cocina, mermelada, gelatina, arroz, harina… y ponlos en fila frente a ti y tu hijo.
En la primera toma de contacto es recomendable que seas tu quien le acompañe con tu mano y le anime a ir descubriendo cada textura, se sentirá mucho más seguro y reforzará su confianza en ti.
Con este juego, los más pequeños aprenderán sobre las texturas, la consistencia de los alimentos y mejorará su sentido del tacto. Al igual, con muchos alimentos, como la mermelada, también podrán activar su sentido del olfato.
Si tienen la edad suficiente, podréis verbalizar las sensaciones, algo que aumentará y enriquecerá su vocabulario.
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Leer y crear cuentos
Escoge cuentos sencillos con situaciones y personajes que le sean familiares: la casa, papá, mamá… Desde los 12 meses puedes empezar a leer cuentos cortos a tu hijo, aunque no entienda el sentido de todas las palabras. Lo que importa a esta edad es la musicalidad de las palabras más que su significado. Que te sientan cerca.
Más adelante, no sólo le podrás contar cuentos más largos, sino que además es muy buena idea que le motives a crear sus propios cuentos contigo.
La lectura es un momento único que compartes con tu hijo. Le expresas tu cariño, te comunicas con él.. Y también almacenará todas esas palabras para más adelante. Cuando sea más mayor, esto ampliará su vocabulario y fomentará su imaginación y creatividad.
Además, en el futuro, cuando atraviese por determinadas situaciones, los cuentos le reconfortarán y aliviarán las malas emociones.
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Juegos brutos para estimular a los niños
Cosquillas, saltos, bailes, carreras… Te ayudarán a conectar con los pequeños, reirte mucho con ellos y aliviar las tensiones del día junto a ellos. Así conoceréis más a vuestros hijos y no acumularéis agresividad.
Este tipo de juegos para estimular a los niños mejorarán su motricidad, su autocontrol y su fuerza. Los peques se conectarán con vosotros y se sentirán más unidos.
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